Ser de la nada es ser monarca ausente,
destronado de su reino por Dios;
de unos dominios donde nada estaba
creado, donde nada nacía ni moría.
Ser de la nada es contemplarse uno
en el espejo de la inexistencia
como un vampiro ante un cristal vacío,
sin color ni reflejos.
Ser de la nada es de todos:
del alma que saluda, de la que se despide.
Nadie puede negar
que ha sido desligado de la nada.
Ser de la nada es como quien nació;
como quien ve pasar los años idos,
después cierra los ojos,
se empeña en verlo todo
y, sin ver nada, muere.
A. Macías Luna
(Derechos de autor)
domingo, 14 de agosto de 2011
SER DE LA NADA
Etiquetas:
Chile,
reflexión,
verso libre
Publicado por
Antonio Macías Luna
a las
16:05
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Extraordinaria locución poética y sugerencia táctil.
ResponderEliminarBegoña.
Y tu poeta eres del todo, porque has parido versos sublimes.
ResponderEliminarUn abrazo Antonio, fue un placer conocerte.